
maltrato físico y mental, el abandono o el tratamiento
negligente, la explotación y el abuso sexual. La violencia
puede ocurrir en el hogar, las escuelas,los orfelinatos,
los centros residenciales de atención, en las calles,
en el lugar de trabajo,en prisiones y establecimientos
penitenciarios.Puede afectar la salud física y mental
de los niños, perjudicar su habilidad para aprender y
socializar, y, más adelante, socavar su desarrollo como
adultos funcionales y buenos progenitores.En los casos
más graves, la violencia contra los niños conduce a la muerte.
Algunas de las señales para reconocer a un niño maltratado son:
Señales físicas repetidas (ojos morados, magulladuras, quemaduras)
- Cansancio o apatía permanente
- Cambio significativo en la conducta escolar sin motivo aparente
- Conductas agresivas o rabietas severas y persistentes
- Relaciones hostiles y distantes
- Actitud hipervigilante
- Conducta sexual explícita e inapropiada para su edad
- Conducta antisocial o sintomatología depresiva.
Para prevenir maltrato físico infantil es necesario tomar primero conciencia del hecho, y es que muchas veces como papás nos creemos superiores y sin defectos, y sobre todo pensamos que nunca debemos pedir perdón a nuestros hijos. El estrés por los problemas del día a día nos hacen desquitarnos con los más débiles, nuestros hijos.
Es por eso que a continuación te daremos una lista de lo que puedes hacer para prevenir el maltrato físico.
Nunca tengas miedo de pedir disculpas a tu hijo. Los niños deben saber que los adultos también nos equivocamos y somos capaces de reconocerlo.
Jamás pongas un sobrenombre a tu hijo, ya que puede dañar su autoestima.
Felicita a tu hijo cuando realice alguna tarea o por su buen comportamiento.
Si sientes que estás perdiendo el control, retírate a tu habitación hasta que pase ese momento, los niños no tienen la culpa de nuestros problemas.